Es una técnica novedosa de tratamiento sin cirugía y con efectos comparables a una liposucción. Es prácticamente indolora y no incapacitante, se realiza con agujas muy finas directamente en el tejido adiposo y se procede a la aplicación de aparatología ultrasónica de radiofrecuencia-cavitación.
Estas ondas ultrasónicas en presencia del líquido inyectado previamente producen una “lisis”(rupturas) de las células grasas que luego el organismo se encarga de eliminar, reduciendo de esta manera el volumen de la adiposidad.
Luego se realiza un drenaje linfático manual o con un equipo especializado para completar el tratamiento.
El paciente continúa inmediatamente con sus actividades habituales y se puede aplicar en ambos sexos.
El tratamiento consta de 5 sesiones, 1 por semana.